jueves, 14 de mayo de 2009

Yo quiero ser tonto

O más tonto aún si lo preferís. El caso es acabar siendo tonto de remate. Sí, sí, no pongáis esa cara.

¿Qué ventajas tiene ser "listo"? Imaginaos que un tipo cualquiera es listo, o al menos parece serlo, o finge bastante bien serlo. En ese caso tendrá cualidades, por poner un ejemplo digamos que sabe de informática, que sabe de música y que sabe dibujar (por poner un ejemplo eh!).

En ese caso lo que conseguirá es que todo el mundo que necesite algo de informática le consultarán a él, todos los que necesiten algo de música lo mismo, y cuando haga falta un dibujo, un mural o lo que sea, pues a él que le llamarán. El tipo irá hasta arriba y aún encima es muy probable que haya gente que le critique, posiblemente por envidia, en plan "y éste qué se ha creído? sabe de todo o qué? es un prepotente que sabe de todo!" etc etc.



Nada. Yo quiero un Marichalazo. Qué maravilloso sería. Que nadie te pregunte nada, porque claro, "el pobre no sabe", nadie te pediría nada. Nadie te exigiría nada, porque "pobrecico, bastante tiene ya con lo que tiene"... Quizás les sabría malo ver que estás ahí sin dar palo al agua... pero la lástima podría más y ni te criticarían. Aún es más, te ayudarían a tí. Puede que hasta el Estado acabara ofreciéndote ayudas. Y, aunque seas ceporro e inútil (ójala) si eres un poco simpático y campechano y tal, serás aclamado y adorado. A los Borbones les funciona.


Todo esto me recuerda mucho al episodio ése de los Simpsons en el que llega un empleado modelo, responsable, inteligente, serio, formal, disciplinado... y que vive solo y de malas maneras, mientras que Homer ya sabemos cómo es (inepto, borracho... habitual, vamos) y cómo triunfa. Era genial ver como Grimes (el empleado formal y bueno) se desesperaba al ver todo lo increíble que tenía Homer (su familia, casa...) y lo que había conseguido (ir a la Luna, viajar tanto, tantas aventuras...). Aquí un vídeo de ese episodio (está en español latino, qué le vamos a hacer) :





Y como pasa siempre con los Simpsons empezaron intentando ser un reflejo de la sociedad... y la sociedad ha acabado siendo un reflejo de los Simpsons.

Pero sí, yo quiero ser como Homer, un inútil total que es un vago, perezoso, tonto pero divertido... y al que todo le sale bien, con su mujer que le adora y le apoya incondicionalmente.

¿Os imagináis? ¿Un país lleno de Homers? Seguro que estaba en crisis total... Sería un país de ineptos, en el que habría crisis seguro, estaría mal organizado, sería un desastre... pero la gente sería feliz con una cerveza y viendo la tele o un partido...
Un momento... esto me suena...

Buenooo muchachada, dejo ya de daros mal, mañana tengo Festival de conciertos, el Plastidepop, prometo contaros qué tal!! Saludoss y ánimooo que ya casi es viernes!!!

2 comentarios:

Moni dijo...

Hey, qué pasa? Cuánto tiempo sin verte! Igual has crecido y todo...jajaja
Por cierto, tengo unas dudillas por ahí del ordenata, que curiosamente tiene que ver tb con el dibujo y la música... igual me podrías ayudar tú un ratico o qué? ;op

Aunque no te escriba a menudo, voy leyendo todo lo que pones por aquí y me sigues sacando la sonrisilla, así que GRACIAS!!! Y no desesperes que seguro que hay mucha gente como yo.

Besicos!!!

jorge dijo...

Qué sorpresa! muchas gracias Moni!!
Es verdad, a ver si nos vemos pronto!!
Besos y graciasss!