Amigos y amigas si en algo hemos coincidido todos los que estamos aquí es en que todos hemos visto dibujos animados de pequeños. Eso sí, no eran iguales los dibujos que se veían hace 15 años que los que se ven ahora, claro. Y de eso os voy a hablar queridos amigos, queridas amigas, queridas familias, que diría Arguiñano.
Ahora siempre se oye eso de que los dibujos de antes sí que eran buenos no como los de ahora que tienen a los críos tontos etc etc… Pero bueno, con mi análisis enseguida veréis que no todo tiempo pasado fue mejor…
Sí, lo sé, voy a hablaros de dibujos que muchos de los que leéis esto, jóvenes muchachos/as, no conocisteis, pero así los conocéis y podéis comprender a la gente carroza y anticuada que os da la brasa (como yo). Ya sabéis, una vez sepáis los dibujos que muchos de nosotros vimos seguro que entonces comprendéis mucho mejor el mundo adulto que os rodea…
Había muchos dibujos animados, muchísimos, seguro que me dejo por nombrar muchos, pero yo los clasificaría en cuatro grupos :
El primero era el grupo de los dibujos animados surrealistas.
Por ejemplo, imaginaos a un perro, un gato, un gallo y un burro. Imaginaos que cada uno toca un instrumento. Imaginaos que forman un grupo y van de gira. Sí, sí, la fantasía erótica de “El Koala” (el de “Opá voy a hacé un corral”). Imaginaos que cada uno tiene su canción, al estilo “Baila Lupo (el perro), baila/baila con tesón”, “Koki, koki, koki (el gallo), eres el rey del corral”, “No me llames Burro/No,no/Porque yo soy Tonto (el burro)/Sí, sí”… y la del gato Burlón que absolutamente nadie recuerda (era un blues triste creo recordar). Pues ellos eran “los Trotamúsicos” (“a Berlín vamos, juntos los cuatro!”). Y los malos de esa serie eran tres tipos llamados “Chef, Bestia y Tapón”, que también tenían su mítica canción, y que no sé porqué luchaban exactamente contra los animalejos, no sé si querían robar los instrumentos, si era un asunto zoofílico o si era simplemente por cazar… siendo así no sé porqué era tan complicado cazar a un triste gallo o a un gato, pero normal, es que no iban ni con una triste escopeta… ¡vended esa bici enorme que no servía para nada y compraros revólveres, pardillos!
Otro tipo curioso era David el Gnomo. Un tipo que no era más grande que la tercera pierna de Dinio, pero que tenía el valor de decir que podía adivinar en qué estábamos pensando con solo mirarnos (qué miedo, ¿de verdad lo sabía y no salía corriendo?), y aún encima fardaba con ser “siete veces más fuerte que cualquiera” (eso es tener cojones, siendo que no nos llegaba ni al tobillo). Y sobre todo fardaba de “siempre estar de buen humor”… claro que siendo que era un experto en hierbas pues no tiene gran mérito.
Y aún más curiosos eran los de Fraguel Rock, que eran unos muñecos tipo teleñecos que vivían en una cueva, a lo hippie, con su célebre canción de “para disfrutar, tus problemas déjalos, para disfrutar, ven a Fraguel Rock”, todo con un rollo muy psicotrópico, rezando siempre para que nunca llegara una fumigación al barrio.
Pero para frikis teníamos a los Fruitis, y no es un juego de palabras. Un plátano con una mochila (Mochilo, fantasía en este caso de Pocholo), una piña con un gorro andaluz (Gazpacho), un cactus (Pincho… no sabía yo que los cactus eran frutas). Sin duda solo un colgado crearía una serie así, pero todo se justificó diciendo algo en plan “con esta serie los niños querrán comer más fruta”. ¡Salvajes! ¿Cómo nos íbamos a comer a Mochilo o a Gazpacho? ¡Nunca más comeríamos fruta! ¡Por algo somos la generación de los Bollicaos!
Imaginaos un perro y un ratón. No, no me refiero a Tom y Jerry ni Rasca y Pica ni cosas así. ¿Qué podríamos hacer con un perro y un ratón? Meteos en la piel de creadores de series. ¿Qué hacemos? ¿Algo en plan uno persigue al otro rollo Coyote y Correcaminos? Pues no amigos, ¡hagamos que den la vuelta al mundo! ¡Y vestidos de traje! ¡Y que sea todo una apuesta! ¡Y qué mal nos sientan los porros, por Dios! Y así nació la vuelta al mundo de 80 días de Willy Fog, el rival de Don Pimpón (Barrio Sésamo amigos, qué nostalgia) en lo que viajes se refiere. Me imagino a Willy Fog en un Dutifrí… “quiero un souvenir de Londres”… “lo siento señor Fog, el último se lo ha llevado el señor Pimpón”, “Maldito Don Pimpón, me las pagarás!!”. Por cierto, ¿os imagináis a lo Bond : “Soy pón, Don Pimpón”?.
Luego estaban las series creadas por gente que estaba muy jodida.
Por ejemplo, ¿qué clase de maníaco depresivo al borde del suicidio pudo crear una serie como “Calimero”?
¿Y qué toxicómano fumeta pudo crear “Alfred J. Quack”, un pato cuyo padre era un topo, quedándose tan tranquilo? (Y su mítica canción sobre mear : “Salpica chapotea feliz en el agua, no dejes que caiga, solo una gotita”).
¿Y serían hermanos el padre y la madre del creador de “Los Osos Amorosos”? (la serie soñada por Ángel Llacer , los primeros dibujos animados gays, luego le dicen al pobre de Tinky-Winky…)
Más tarde llegarían las series japonesas. Si estamos diciendo que los creadores de dibujos eran surrealistas, frikis, jodidos y colgados, era cuestión de tiempo que de ello se encargaran los japoneses.
Y entonces vinieron series como “Chicho Terremoto”, una serie que sería impensable hoy en día. Y no porque sea una serie difícil de realizar, para nada, eran cuatro tramos, ojos rasgados como hechos con un cúter… y poco más. Pero sería impensable porque aquél chinito levantaba faldas a las niñas, se portaba mal, hacía trampas… vamos, que hoy en día le saldrían cien mil denuncias de asociaciones defensoras de mil cosas y la retirarían. ¿Cómo? ¿Qué hoy en día ya hay una serie así de un tal Chin-Chan? ¡Tanto comparar lo de antes y lo de ahora y todo vuelve amigos!¡Preparaos para “la bola de vidrio”, “el equipo B”, y oh no! La clonación de Leticia Sabater! (sin playas de por medio esperemos)!
La antítesis a estos personajes sería Heidi, esa niñita tan inocente e ingenua que protagonizaba la serie en la que los españoles, que somos de mente sucia, teníamos que buscarle la maldad por todas partes, que si el abuelo era pederasta, que si Niebla (el perro) era un gran aficionado a las mermeladas y los armarios, que si el abuelo se rozaba mucho con la parapléjica aquélla, que si Pedro con las ovejas… en fin. Buscad en youtube y veréis que hay cada cosa…
Y bueno, qué decir de “Campeones”… la serie de Oliver y Benji. Se ha dicho tantooo de esa serie… y todo cierto : el campo tenía la extensión de tres ciudades juntas, tardaban 3 horas en llegar al área del otro equipo, volaban para rematar y se quedaban en el aire durante minutos, aunque en teoría eran 22 en el césped solo tocaban el balón 4 (o 3 si contamos al que le daban ataques al corazón cada dos por tres, Julian Ross), ahí estaba el gitanillo Mark Lenders, Benji Price paralotodo y siemprelesionado, los gemelos Derrick (subiéndose al larguero, en la asociación de parapléjicos de España tienen una foto suya en honor a los muchos miembros que hicieron gracias a los gemelos), el perdedor Bruce (¿qué sería de una serie sin la figura del desgraciado del que reírse?) y por supuesto el protagonista Oliver Aton, con su sueño de ir a Brasil (cuando allí en realidad lo que todos quieren es pirarse)… y ahí aparecía mi personaje favorito de la serie, Roberto Sedinho, un borrachín que se hacía muuuy amigo de los niños y que vivía en casa de Oliver con su madre mientras el padre estaba navegando muuuy lejos. Así que Roberto o era el amante de la madre de Oliver… o era un pederasta, y además borracho. Un gran tipo, vamos, ideal para que un crío de 10 años se vaya con él.
Y los japoneses fueron más allá (y no solo los japoneses) y entonces tenemos otro tipo de series de dibujos animados, que son las series difíciles de comprender.
Como una serie clásica : “Mazinger Z”… Un robot cuyas extremidades salían disparadas a los gritos de “puños fuera” o “planeador abajo”, no me preguntéis si con todas las partes de su cuerpo aquello iba con tanta fuerza, porque no lo sé. El caso es que luchaba contra un malvado que era mitad de cuerpo hombre, mitad de cuerpo mujer, lo que sería fácilmente un personaje protagonista de una peli de Almodóvar, vamos. Algo así como Amor de Gran Hermano, o como decía Carmen de Mairena : “soy de cintura para arriba como Rocío Jurado y de cintura para abajo como Pedro Carrasco” (por cierto, ambos muertos, ¿estará igual la actividad de la Mairena?). Mucha gente busca y rebusca teorías y conspiraciones en esta serie, que si era una serie nazi, que si el malo representaba a los soviéticos… yo no tengo ni idea, pero el problema no creo que lo tenga el que hizo la serie, si no el que con treinta y pico años dedica su tiempo a buscar conspiraciones de éstas…
Bueno, y los Pokémon, qué? A mí me ha pillado ya viejo y de verdad que no sé ni de qué va eso de tener bichos raros que hacen cosas aún más raras. De repente un crío necesita la ayuda de un bicho amarillo llamado Pikachu para que le dé una descarga eléctrica y uno piensa “¿pero este crío es normal?”, “¿qué vicio tiene, no?”, me lo imagino ahí con unas pinzas… “Pikachu, pónmelas y dale fuerte, oh sííííí!”.
¿Y qué me decís del Inspector Gadget? ¿Cómo puede despertarse con dignidad ese tipo por las mañanas cuando, a pesar de contar con todo tipo de herramientas que podrían ser útiles, el hombre solo soluciona sus casos con la ayuda de su sobrina de 10 años y su perro… siendo que además el malo de la historia es una simple mano y su gato?
Pero el gran tridente de series jodidas jodidas de entender sería el formado por “Bola de Dragón”, “Dragones y Mazmorras” y “Caballeros del Zodíaco”. De crío las ves, te encantan, las entiendes. Pero de adulto las miras y piensas respectivamente : “de qué coño va eso?”, “¿ese tío del pelo punta qué hace ahora que le sale fuego? ¿Y ahora es un mono? ¿Y ahora es el padre o el hijo?” o dices “¿y esos niños estaban en el parque de atracciones y ahora están atrapados en un mundo rarísimo de dragones? ¿y ese tipo que parece Jordi Puyol qué pinta?” o lo de “¿entonces Pegaso está en la Galaxia de Andrómeda esperando a que el Ave Fénix renazca?”, ¿pero de qué va todo eso?
Y te haces todas esas preguntas sin entender nada pero lo peor no es eso, lo peor es que tu sobrino de casi 6 años se entera de todo y te tiene que explicar en qué consiste todo.
Sin embargo, por muy raras y diferentes que sean, todas tienen algo en común : las canciones de las series eran terriblemente malas. ¿Quién las hacía? Esas canciones eran pésimas, pero se hicieron famosísimas y de oro… Leonardo Dantés, ¿dónde estabas tú, que hubieras hecho tu agosto? ¿Dónde estabas en esa época? (Bueno, mejor no saberlo…).
En fin, amigos y amigas, esas fueron parte de las series más míticas de nuestra infancia, vosotros veréis si son mejores, peores, iguales, reguleras… o lo que sea comparadas con las de ahora, pero como veis peculiares eran, y siempre son un recurso fácil a la hora de culparles de nuestros traumas.
Saludosss y si queréis recordar de forma más audiovisual os dejo un vídeo :
martes, 29 de julio de 2008
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
8 comentarios:
pues la verdad el ultimo tipo de series si no las ves desde el principio te pierdes,y por cierto te faltan los animes,cuyo objetivo de todos es ser el mejor del mundo en algo o salvar al mundo o a alguien en especial
jeje hola rubén gracias por escribir al fin!! ;)
Uy de animes yo ni idea... de hecho lo que he hecho ha sido hablar de los dibujos animados de mi época, que algunos han vuelto (Oliver y Benji, Heidi...) pero otros ni os sonarán jeje
La verdad es que cada vez se me ocurren más series que no he puesto y podría haber añadido, como los Snorkles, las Tortugas Ninja (4 tortugas a las que les gusta la pizza son adoptadas por un ratón que les enseña artes marciales, toma ya!) etc etc etc
Saludos a todos y seguid animándoos a escribir!!
macuerdo yo,como diría un abuelo,que jugabamos a q t tarareaba una sintonia y tenias adivinar d serie se trataba,q tiempos....
jaja sí, pero todo vuelve : ahora Hugh Grant (o es Emilio Aragón?) presenta un programa al mediodía en Tele5 que va precisamente de eso...
Besos!
...qué familiar está esto no?..me voy a unir...a mi me gustaba Chicho terremoto, que jugaba al basket...era un poco sucillo..por que les miraba las bragas a las niñas..me extraña que no te suene..
besitos
jaja qué graciosa...
ay si leyésemos todo el texto, verías que sí he hablado de Chicho Terremoto... un gran ejemplo, claro que sí!!
Besoss y dos sostenidos, guapa!
YA E VUELTO COLEGA
JAJAJA DPM L MONOLOGO
A MI M MOLA OLIVER Y BENJI
Y EL BALON ERA OVALADO JAAJA
UN 10 COMO SIEMPRE
UN PLACER LEER ESTAS LINEAS K NOS DEJAS Y K NOS ACEN REIR A CARCAJADAS (POR LO MENOS A MI)
Y SALUDO Y YA NOS VEREMOS
muchas gracias Deivid!! un placer hacer reír!!!! thanks!
Publicar un comentario